domingo, 7 de junio de 2009

NIÑOS SICARIOS

Cruda realidad de una sociedad descompuesta:

'Niños sicarios' han cometido 542 homicidios en dos años; así funciona su tenebroso mundo


Este muchacho trabaja como sicario en el Eje Cafetero. De allí, dice, se mueven a ciudades cercanas e incluso a otras ciudades para 'hacer vueltas' de la mafia.
En Bogotá hay dos muchachos que no llegan a los 16 años y que tienen al menos cuatro muertos encima. En Medellín, existe la 'tercera generación', sobrinos y nietos de antiguos gatilleros de Escobar.

Desgarrador relato de un joven asesino
Sus 'tarifas' oscilan entre los 500 mil y los tres millones de pesos y quienes los utilizan saben que con ellos tienen varias 'ventajas': son asesinos con pocos remordimientos; más osados, porque saben que la ley los protege, y suelen despertar menos sospechas entre escoltas y víctimas.El caso de una abogada en Medellín que estaba a un mes de dar a luz y que fue asesinada por dos muchachos sicarios -uno de ellos menor de edad y el otro apenas estrenando ciudadanía- ha puesto, nuevamente, los ojos del país sobre un problema lamentablemente recurrente: el de los niños asesinos.

El viernes, el presidente Álvaro Uribe ordenó capturar cuanto antes a los jefes de las bandas que los utilizan. Un número creciente de los asesinatos de menores corresponde a casos de sicariato.En cada capital hay una especie de 'top' de los más temidos. En Bogotá, un muchacho del sector de Bosa, que apenas llega a los 16 años, está en un centro de reclusión por la muerte de su novia, también adolescente, a la que asesinó porque iba a dejarlo. En su expediente figuran cuatro asesinatos, entre ellos el de un hombre abaleado en cercanías del Jardín Botánico. Es uno de los casos de sicariato con niños registrados en la ciudad.Según les confesó a los investigadores, ella se alejó cuando él pasó de los robos a las muertes por encargo. Como la muchacha no quiso "calentarse con esas vueltas", decidió matarla en un potrero.Otro caso reciente fue el de un hombre que murió abaleado en su BMW en el norte de Bogotá. El asesino le disparó con una pistola y con un revólver. Ya hay pistas de él: le dicen 'el Hippie' y tiene apenas 16 años.Y en Las Cruces, en el centro de Bogotá, se habla de la mala suerte de 'Harrison', que hace algunos meses asesinó a un hombre en el aeropuerto de Guaymaral. No solo lo cogieron sino que no le pagaron los 500 mil que le habían ofrecido por la 'vuelta'.

El relevo de los de EscobarEn Medellín, muchos de los 'pelaos' que hoy se dedican a esas vueltas son hermanos menores, hijos y sobrinos de antiguos gatilleros de Pablo Escobar.En este momento, dicen en algunas zonas del oriente de la capital paisa, se está abriendo paso la tercera generación y sus alias ya se pronuncian con respeto en los 'combos', bandas de barrio que a su vez trabajan para la 'organización madre' del delito en esa zona: la temida
'Oficina de Envigado'

¿Cómo funciona ese mundo? Hace unos meses, un joven de 18 años que fue un 'duro' entre los sicarios de la Comuna 8 en Pereira, habló con un reportero de EL TIEMPO. Por su primer asesinato le dieron 200 mil pesos hace cinco años: "Tenía 13 la primera vez que 'me eché a uno'. Un 'man' del barrio que estaba mal con el marido de la hija me contrató. Me le acerqué por detrás y le puse el 'fuete' (arma) cerca de una oreja".

Por 'trabajos' en otras zonas del país pueden recibir hasta tres millones. Sin embargo, los menores son el último eslabón en la cadena. La Policía y la Fiscalía calculan que las 'oficinas de cobro' que los utilizan pueden llegar a cobrar hasta 50 millones de pesos por ese mismo asesinato. Todo depende de la importancia de la víctima. "Para tener trabajo hay que caminarle rectico al dueño de la 'oficina' y demostrar que uno es bueno para voliar plomo", dijo. En su sector -pobre como todos los que surten esa 'mano de obra'- el más viejo de ellos tiene 22."Yo a veces pienso que estoy viviendo horas extras, porque en cualquier momento otro 'pirobo' lo pesca a uno", aseguró. Los más pequeños de esos 'combos', que rondan los 11 años, mueven 'los fuetes', pues la Policía no acostumbra a requisarlos.Pero no es un 'oficio' de dedicación exclusiva: cuando no hay 'vueltas' de ajustes de cuentas, las pandillas se dedican al robo de apartamentos o al fleteo. De allí que no sorprenda la facilidad con la que pasan del robo al asesinato a sangre fría.
Más de 18 mil menores delincuentes

Desde marzo del 2007, cuando comenzó a operar la Ley de Infancia y Adolescencia, hay registrados 18.555 casos de jovenes delincuentes que están entre los 14 y 18 años, según cifras del Icbf. Por entrar en conflicto con la ley otros 223 niños, que no llegan a los 14 años, han sido atendidos por esta institución.

El hurto representa cuatro de cada diez delitos cometidos por menores. Le siguen el narcotráfico, porte de armas, lesiones y homicidio.

Este año, en Bogotá, han sido capturados 1.904 menores. En Medellín, las autoridades arrestaron a 1.069 delincuentes juveniles como los que esta semana asesinaron a la abogada Patricia Mejía, sin importarles su estado de embarazo. "Es un mundo invisible que nadie quiere ver, pero la verdad es que hay niños que han cometido crímenes abominables", asegura una fiscal que todos los días lidia con menores delincuentes.

Poco pueden hacer para contenerlos y más tardan en capturarlos que en volverlos a encontrar delinquiendo. "Son niños para unas cosas, pero para lo malo no tienen escrúpulos", le aseguró la fiscal a EL TIEMPO.

Según las autoridades, uno de los menores delincuentes que encabeza la lista de los más temidos en la capital del país es un joven de 17 años, jefe de una pandilla en el sector de Quirigua.
Entre sus delitos, figura el asesinato de un estudiante el pasado 27 de abril, a quien atacó con un puñal para robarle un Ipod. En su expediente aparecen atracos, robos a casas, lesiones personales y homicidios.
REDACCIÓN JUSTICIA. EL TIEMPO

NIÑOS SICARIOS.

LA DESHIDRATACION

Deshidratarse, incluso de forma leve, disminuye los niveles de concentración y vitalidad


2 litros de agua pura es la cantidad ideal -además de otros líquidos- que recomiendan los expertos para tener una buena salud.
Además, se tiende a caer en el desgano y la fatiga mental y física. No es para menos: el 70 por ciento del cuerpo humano está compuesto por agua, que es esencial para el organismo.
El cuerpo la necesita para llevar a cabo procesos fisiológicos como la digestión (absorción y excreción), la regulación de la temperatura corporal y el transporte de nutrientes y otras sustancias corporales.

Vale decir que no se necesita ser un deportista de alto rendimiento o estar sometido todo el tiempo a altas temperaturas y a labores físicas extenuantes para perder líquidos.

El organismo humano carece de mecanismos para ahorrar agua, razón por la cual es necesario reponer aquella que se pierde a través del sudor, la orina o la respiración; cuando este no recibe la cantidad de líquidos necesaria para funcionar correctamente, tiende a fatigarse más de lo normal.

Desde el punto de vista fisiológico, no mantener los niveles de energía adecuados puede llevar a las personas a experimentar cambios en sus estados de ánimo, por lo que conviene abrir espacios durante el día para tomar líquido y pequeñas comidas.

Aunque la cantidad de líquido que requiere una persona depende de factores como su nivel de actividad física y la temperatura ambiente, hoy en día se reconoce que la necesidad hídrica del organismo está en 10 a 14 vasos al día de líquidos, incluyendo leche, café, jugos y otras bebidas.

Factores actuales como el calentamiento global, una mayor contaminación del aire, la creciente exposición a rayos lumínicos, computadores y otros aparatos eléctricos y la cada vez más alta concentración de personas en espacios reducidos, hacen necesario que se aumente también la reposición de agua.

De allí la recomendación de que, adicional a los líquidos que se toman con los alimentos, cada persona beba como mínimo ocho vasos de agua pura, a diferentes horas del día, para mantener el cuerpo bien hidratado.

En la mañana: el cuerpo viene de descansar de cinco a siete horas y debe eliminar las sustancias de la noche y equilibrar su nivel de líquidos para enfrentar la nueva jornada.

A media mañana: hidrata el sistema digestivo y lo prepara para recibir el almuerzo; esto contribuye a mejorar la digestión.

A medio día: es muy importante tomar de uno a dos vasos de agua con el almuerzo (dependiendo de los alimentos consumidos, claro). La saliva, el jugo gástrico y los jugos del intestino reciben los alimentos deben procesarlos; para ello necesitan tener un medio de transporte, que es el agua.

En la tarde: se necesita para refrescar la piel, humedecer la boca y ayudarle al organismo a eliminar, a través de la orina, las sustancias que ha producido de desecho.

En la noche: tras una jornada de trabajo es muy útil para hidratar la piel y prepararse para descansar.

¿Para qué sirve el agua en el cuerpo?
Es el medio de conducción de todas las sustancias que necesitan las miles de células que componen el organismo. Allí se diluyen parte de las sustancias nutritivas necesarias para el
organismo.

El peso corporal del cuerpo está representado por el 60 por ciento en líquido; el agua es el principal disolvente. Es el componente principal de la sangre, medio de transporte de los glóbulos rojos que llevan oxígeno a todas las células del cuerpo.

Es el componente principal de los procesos de digestión y absorción de los nutrientes de los alimentos.

Todos los órganos son bañados por medios líquidos; estos proveen el medio en el que fluyen las sustancias para nutrir y eliminar lo que no es necesario. Es el medio a través del cual se eliminan las sustancias tóxicas.

Dentro del agua se llevan a cabo todas las reacciones químicas del organismo, haciendo una dinámica dentro de un equilibrio hídrico y de elementos fundamentales como los minerales.

No espere hasta tener sed para beber líquidos
- Tome bebidas en cada comida y refrigerio.
- Elija aquéllas que sean de su agrado. Varios estudios demuestran que los niños y los adultos consumen alrededor del 50 por ciento o más de líquidos cuando están aromatizados, en comparación con el agua pura.
- Coma más frutas y verduras; tienen un alto contenido de agua.
- La sed no es una medida confiable de hidratación, este alerta, es un síntoma ya de deshidratación.
- Mantenga siempre una botella de agua o alguna otra bebida en su escritorio, en el carro, en la cartera o en cualquier lugar que le recuerde que debe consumir líquidos.
- La temperatura ambiente es la más recomendada para beber agua. Cuando los líquidos se sirven a temperaturas moderadas (ni demasiado altas ni demasiada baja) existe una tendencia a consumirlos en mayores cantidades.
- Elija las bebidas que se ajusten a su nivel de actividad y estilo de vida. Si no desea consumir demasiadas calorías, considere la posibilidad de ingerir bebidas de bajas calorías o elabore sus propias bebidas, tenga presente el contenido calórico de las bebidas que ingiere.
REDACCIÓN SALUD
El orgasmo femenino quedó al desnudo en estudios científicos, tras décadas como tabú

Pasó a ser a objeto de investigaciones que buscan desmitificarlo y entender por qué algunas mujeres lo experimentan con facilidad mientras que para otras es un ilustre desconocido.
La publicación New Scientist recogió seis revelaciones científicas en sexualidad femenina

1. La eyaculación femenina
No son pocos los científicos que hoy aceptan que algunas mujeres pueden eyacular algún tipo de líquido durante la excitación sexual o el orgasmo.
Ya en 1950 Ernst Gräfenberg, médico alemán que dio su nombre al punto G, llamó la atención sobre este tema en un documento publicado en la Revista Internacional de Sexología.
En 1981 dos sexólogos estadounidenses, Beverly Whipple y John Perry, salieron al paso a otras declaraciones según las cuales el mencionado líquido era orina y demostraron que este líquido tiene muy bajos niveles de urea y creatinina -las dos principales características químicas de la orina- y que se origina en un tejido femenino conocido como glándulas de Skene, ubicadas alrededor de la uretra (conducto de la orina).
Esta es aproximadamente la misma superficie que el punto G, esa parte que sobresale dentro de la vagina que es sensible a la estimulación.
La variación en la cantidad de este tejido explicaría por qué no todas las mujeres lo tienen. Al igual que ocurre con el semen del hombre, las mujeres que se cree que eyaculan tienen gran variación en la naturaleza y el volumen del fluido producido: este puede ir de lechoso a blanco y de unas gotas hasta varios centímetros cúbicos.

2. El punto G sí existe
Se trata de una pequeña región en la vagina que al estimularse puede -según la creencia popular- producir orgasmos intensos.
El término, acuñado por Gräfenberg en 1950, se refiere a una zona de unos pocos centímetros dentro de la vagina, adelante y arriba, es decir en las llamadas glándulas de Skene (equivalente femenino de la próstata).
El tejido que las rodea, lo que incluye parte del clítoris que llega hasta dentro de la vagina, se hincha con sangre durante la excitación sexual.
Como no todo el mundo aceptaba su existencia, Emmanuele Jannini, de la Universidad de Aquila (Italia), y su equipo decidieron buscar marcadores bioquímicos de la función sexual en esta zona y encontraron la Fosfodiesterasa 5, una enzima que actúa sobre el óxido nítrico que provoca erecciones.
El viagra funciona al bloquear la Fosfodiesterasa 5. También se hicieron disecciones en cadáveres de mujeres y se encontró una gran variación en la cantidad de este tejido, que va desde la falta de él hasta tamaños palpables, lo que explicaría por qué en algunas mujeres puede ser objeto de estimulación y en otras no.
Se dice que los medicamentos erectores, como el Viagra, actuarían en este punto hinchándolo y poniéndolo de manifiesto para su estimulación.
Claro que la presencia de esta estructura no siempre garantiza orgasmos y su ausencia no significa que no puedan tenerse. Aún hay que investigar más.

3. El cerebro se apaga durante el orgasmo
Un estudio con escáner cerebral mostró que cuando la mujer tiene orgasmos su cerebro no solo es por completo ocupado por el sexo sino que muchas de sus áreas se desactivan, incluidas las que participan en la emoción.
De hecho, dice Gert Holstege, de la Universidad de Groningen (Países Bajos), "en ese momento las mujeres no tienen sentimientos emocionales".
Otro estudio demostró que cuando las mujeres son estimuladas, la actividad cerebral se incrementa en el área sensorial del cerebro, pero cae en muchas zonas de manera significativa como la amígdala y el hipocampo -zonas involucradas en la vigilancia y la ansiedad- y la corteza prefrontal.
Los hallazgos confirmarían la creencia de que las mujeres no pueden disfrutar del sexo a menos que estén relajadas y libres de preocupaciones y distracciones.

4. Muchas no los tienen
Una encuesta hecha hace diez años en Estados Unidos (divulgada en el Journal of the American Medical Association) encontró que cerca del 43 por ciento de las mujeres tiene algún problema con su vida sexual.
Valga decir que entre todos los trastornos sexuales, la libido baja es la que está claramente vinculada a causas psicológicas o emocionales, como el estrés, la fatiga y la depresión, especialmente entre las mujeres jóvenes.
Que el sexo implique factores físicos y sociológicos no es nada nuevo, pero hay que reconocer que hoy existe demasiada presión sobre la mujer, y aunque la ciencia médica busca fármacos para ayudarle a aumentar el deseo y mejorar sus respuestas físicas, es importante hallar la forma de que controle su propia sexualidad.
"No estamos diciendo que los orgasmos son necesarios para que una mujer sea una mujer de verdad o para que tenga cierta calidad de vida -explica Laura Berman, terapeuta sexual de la Universidad de California-, lo que decimos es que toda mujer tiene derecho a un orgasmo, si ella lo quiere".

5.Los genes afectan la frecuencia
De acuerdo con el primer estudio genético del orgasmo femenino, hasta el 45 por ciento de la variación en la capacidad de la mujer para tener orgasmos se debería a los genes.
En otras palabras, existe una base biológica subyacente a la capacidad de una mujer para alcanzar el orgasmo.
Las bases anatómicas, fisiológicas o psicológicas siguen siendo inciertas, dice Tim Spector, del hospital San Thomas de Londres (Reino Unido), que llevó a cabo el estudio.
"Es decir que no es puramente cultural o debido a la presión social o a diferencias en la educación o la religión; hay grandes diferencias entre las mujeres y muchas de estas diferencias se deben a los genes", dice Spector en un informe publicado en Cartas de Biología.

6. La tecnología puede ayudar
Stuart Meloy, especialista en cirugía y dolor, consultor en Winston-Salem, Carolina del Norte, tuvo la idea de crear un dispositivo para la producción de orgasmos mientras llevaba a cabo un procedimiento para el alivio del dolor en una operación de columna vertebral de una mujer.
"Estábamos implantando unos electrodos en la columna y usando impulsos eléctricos para modificar la señales de dolor que pasan a lo largo de los nervios para encontrar la mejor posición de los electrodos, cuando de repente la paciente comenzó a exclamar enfáticamente (...) Le pregunté qué era y me dijo: 'Vas a tener que enseñarle a mi marido a hacer eso' ".
Meloy espera comenzar los ensayos clínicos con el dispositivo (que ya recibió el nombre de 'orgasmatron') a fines de este año. Cree que ayudaría a las parejas a superar las dificultades causadas por la disfunción orgásmica.

Testimonio de una colombiana anorgásmica
Sandra, licenciada en literatura, 32 años
Empecé a percatarme de mi anorgasmia cuando mis amigas contaban sus experiencias y todas describían sensaciones que jamás he sentido.
En una ocasión, una de ellas me dejó en el escritorio un artículo sobre la anorgasmia y me sentí plenamente identificada con lo que allí decía. Ella me insistía en qué debía hacer algo, pero prácticamente hice caso omiso.
Al principio no le di demasiada importancia pues sentía tranquilidad al ver que a muchas mujeres, como a mí, les ha pasado o les pasa y que aparentemente es fácil de resolver o creí que así era; pero recientemente he comenzado a pensar que me estoy perdiendo de algo interesante y que no lo puedo resolver yo sola, aunque no es un tema obsesivo para mí alcanzar el orgasmo.
Realmente no he hecho nada para remediar esta situación. No he consultado a ningún experto, a veces me da pena hacer una cita exclusivamente para contar esto y tal vez por eso pospongo el tema.
No me siento afectada emocionalmente, solo que me pregunto a mí misma qué es lo que me pasa, si es netamente psicológico y debo poner más de mi parte, o se trata de mi pareja.
Mi pareja actual, con la que llevo siete años, no lo ha tomado ni bien ni mal; sin embargo, en una ocasión me preguntó por qué yo no reaccionaba a un estímulo como lo hacían otras mujeres con las que él había estado y me sugirió consultar con un médico, pues le gustaría que sintiera un orgasmo, no solo por mí sino por complacerlo a él.
De hecho, en algunas ocasiones, me pregunta qué es lo que siento y cómo lo siento pero al final, nada... No he probado ningún método o tratamiento especial, solo estímulos específicos que, en teoría, deberían provocar un orgasmo, pero tampoco.
No estoy resignada pero soy consciente que no he hecho mucho por superar esta situación; me interesa hacerlo y reconozco que debo buscar ayuda en este sentido.
Sigo sosteniendo mis relaciones sexuales, pero he notado que a veces no le doy la suficiente importancia a mi vida sexual pues me concentro en mis hijos y en mi trabajo, sé que no está bien, pues una relación de pareja se cimienta en parte en una buena vida sexual... para mi el sexo es una forma de comunicar afecto y cariño por el otro, de sentir placer físico y emocional, de relajarse
FUENTE : New Scientist